por Juan Antonio Hormigón
ADE-Teatro nº 124, Enero / Marzo 2009
Visiones ciudadanas de Córdoba
Autor: Ángel B. Gómez Puerto.
Editorial: Íttakus-Publicatuslibros.comEn el ABC de hoy, el Baranda Supremo del Cabildo canta la gallina de plano:
-¿Estaría usted de acuerdo con que las cofradías pudieran acceder a la Catedral a través de una segunda puerta?
-Esa propuesta no ha llegado todavía al Cabildo. Tendríamos que hacer un estudio muy concienzudo de su viabilidad. Y si éste concluye que, en función de la legislación vigente, no hay problema en que se use esa puerta, pues nosotros tampoco lo pondremos. Aunque somos conscientes de que se trata de una obra de Rafael de la Hoz, ensamblada en madera del Líbano, y eso costó un dineral montarlo. Pero, si se determina que hay que sustituirla, nosotros no tenemos nada más que añadir.
¿Costó un dineral montarlo, señor cura? La pasta, siempre la pasta. ¿Y si en lugar de sustituirla no empiezan a poner ya todas las demás, mandan al almacén las infumables capillas rococós y adecentan ese muro de la vergüenza que tienen en el patio?
-Usted declaró en una ocasión que no iba a permitir que se clavara ni un solo clavo en la Catedral...
-Bueno, era una frase excesivamente retórica. Lo que yo quería decir es que un proyecto de este tipo no podía tener ningún sentido de teatralidad ni de minusvalorar los sentimientos religiosos cristianos. Nosotros no queremos que en las visitas se introduzca ningún elemento ideológico, sino simplemente relatar con la visita la historia de este monumento, para que todo el mundo que la haga pueda descubrir la belleza de una obra de unos hombres de fe que han sabido expresar esa belleza con unos elementos arquitectónicos perfectamente ensamblados. Aquí hay elementos desde la época visigoda hasta la moderna, y todos ellos hacen ver que éste es un edificio vivo.
Clavos, sí, clavos, pero no dijo nada sobre arcayatas retóricas y de jierro ¿verdá, señor cura?
La Catedral no necesita ponerle colgaduras, ni nada especial, para ver la belleza y el colorido de esos arcos superpuestos. Aquí la gente tiene que saber que viene a un edificio eminentemente católico, cristiano. Las visitas serán para que quienes las disfruten vivan la experiencia religiosa de los cristianos. Este edificio está pensado para que el hombre se encuentre con Dios, y para eso están los signos litúrgicos. Aquí no ha estorbado ninguna de las culturas, todas han contribuido a la construcción de este edificio, pero hay que tener en cuenta esa reelaboración que ha hecho el pensamiento cristiano. Éste es el lugar más sagrado de la Diócesis.
Lo dicho. Se confirma palmariamente que la negociación con las fuerzas zombis, vivas y vivales de esta ciudad se basó en la conversión del cacareado supermegaespectáculo multimierda en un cursillo de catequesis express con musiquilla de órgano y peste a alcaloide incensario. Los guiris que piquen con tan burdo señuelo se quedarán a pernotar en la ciudad, hartos de salmorejo y reconfortados espiritualmente. Aaaaaaaaaaaméeeeeeeeeen.
Ahora se entienden las misteriosas palabras de nuestra beatíphica alcaldesa Rosa (de Pasión) Aguilar acerca de que EL AYUNTAMIENTO FOMENTARÍA EL TURISMO RELIGIOSO.